Establecemos y mantenemos dosis máximas para proteger la salud de las personas, priorizando siempre la seguridad en cada proceso. Nuestras memorias de cálculo incluyen evaluaciones detalladas del factor de ocupación, el cuadrado de la distancia, y las características específicas de las fuentes radiactivas presentes. Además, verificamos la cantidad de radiación en áreas críticas para asegurar que las dosis recibidas se mantengan dentro de los límites permitidos por las normativas internacionales, contribuyendo a un entorno controlado y seguro en todas las instalaciones.

Buscamos siempre optimizar las dosis recibidas, manteniéndolas tan bajas como sea razonablemente posible. Esto implica el uso eficiente de materiales de blindaje, la consideración del cuadrado de la distancia para reducir la exposición y el ajuste de los factores de ocupación en áreas de trabajo. Además, implementamos tecnologías avanzadas de monitoreo y control de fuentes radiactivas para evaluar y ajustar la cantidad de radiación en tiempo real, asegurando una protección radiológica efectiva y constante. Nuestro compromiso es ofrecer un entorno seguro mediante prácticas innovadoras y el cumplimiento de normativas internacionales.

Cada proyecto que involucra radiaciones ionizantes es cuidadosamente evaluado para asegurar que los beneficios superen los riesgos. Esto garantiza que nuestras soluciones no solo sean efectivas, sino también justificadas desde un punto de vista ético y legal.